Siluro

Silurus glanis (Linnaeus, 1758)

Pez muy grande (en el Ebro se han capturado ejemplares de más de 2 m. de longitud y de 90 Kg. de peso). Cuerpo alargado y comprimido lateralmente. La aleta dorsal, las pectorales y las ventrales (estas cuatro últimas bastante adelantadas) son de un tamaño relativamente pequeño, mientras que la anal es muy larga y está casi unida a la caudal. Carece de escamas, teniendo la piel dura y recubierta de mucosidad. Cabeza grande y aplanada, con una boca también grande y rodeada de seis barbillones. Ojos relativamente pequeños. Habita los tramos bajos de los ríos (buscando zonas de corriente lenta), lagos, embalses y otras masas de agua estancada.

Es una especie originaria del centro de Europa que se introdujo en la península ibérica en el año 1974. Dicha introducción se realizó de manera ilegal en el embalse de Mequinenza (río Ebro), desde donde se extendió a otros puntos de esta cuenca. Gracias a su talla constituye un deseado trofeo de pesca, por lo que continúa su expansión a otros lugares de la geografía ibérica, mediante translocaciones ilegales que no tienen en cuenta el perjuicio que este voraz depredador causa a la fauna autóctona (otros peces, anfibios, reptiles e incluso aves y pequeños mamíferos están en su dieta). En Ávila podemos encontrarlo en el río Tiétar, principalmente en el embalse de Rosarito (en el que ya se han capturado algunos ejemplares de más de 1 m. y 40 kg.).

 

Peces de Ávila

Salvelino

Salvelinus fontinalis (Mitchell, 1815)

Pez de tamaño medio que, en la península ibérica, suele alcanzar tallas entre 20 y 35 cm. (algunos ejemplares han llegado a los 50), con el cuerpo alargado y algo comprimido lateralmente, de color verde oliváceo y salpicado por unas características manchas amarillentas y anaranjadas. Cuenta con una segunda aleta dorsal adiposa. Escamas pequeñas. Boca grande y provista de dientes. Habita los tramos altos de los ríos, así como lagos y embalses de montaña, buscando aguas muy frías y carentes de contaminación.

Es una especie originaria de Norteamérica que se introdujo como pez de cultivo en la península ibérica a finales del siglo XIX, habiendo incrementado su presencia durante el siglo XX gracias a translocaciones ilegales motivadas por su interés para la pesca deportiva. Constituye un serio competidor para la trucha común autóctona, llegando en ocasiones a depredar los alevines de ésta. En Ávila está presente en la Sierra de Gredos, concretamente en el circo glaciar de Las Cinco Lagunas.

Peces de Ávila

Trucha arco-iris

Oncorhynchus mykiss (Walbaum, 1792)

Pez grande (supera fácilmente los 70 cm. en su lugar de origen) que en la península ibérica rara vez llega a los 50 cm. (algunos ejemplares que han logrado sobrevivir en libertad). Tiene el cuerpo alargado y algo comprimido lateralmente, con una coloración variable en función del lugar en el que habita, presentando en todo caso manchas negras por el cuerpo y una banda lateral irisada. Posee una segunda aleta dorsal adiposa que, junto con la primera dorsal y la caudal, también presenta manchas negras similares a las del resto del cuerpo. Escamas pequeñas. Boca grande y provista de dientes. Habita los tramos medios y altos de los ríos, aunque, menos exigente con la calidad de las aguas que la trucha común, puede encontrarse en embalses y otras aguas más lentas.

Es una especie originaria de Norteamérica que se introdujo en la península ibérica a finales del siglo XIX, habiendo sido objeto de cultivo para consumo y repoblación con la intención de fomentar la pesca deportiva. Dicha repoblación está siendo frenada en últimos años ya que constituye un serio competidor para la trucha común autóctona a la que ha llegado a desplazar en algunos lugares. En la provincia de Ávila se pueden encontrar algunos ejemplares que han sobrevivido de las sueltas realizadas en cotos intensivos, pudiendo llegar a criar en libertad en algunas gargantas de la subcuenca del Alberche, donde se han encontrado individuos de menor talla que los soltados en las repobaciones.

Peces de Ávila

Gambusia

Gambusia holbrooki (Girard, 1859)

Pez pequeño (es difícil encontrar machos que superen los 3 cm. y hembras mayores de 7) con un acentuado dimorfismo sexual: las hembras, además de su mayor tamaño, poseen el vientre arqueado y con una mancha oscura muy visible durante la “pseudogestación” (se trata de una especie ovovivípara, la incubación se realiza en el vientre de la hembra); los machos adultos presentan una aleta anal modificada en la que varios radios forman un órgano copulador (gonopodio) que le sirve para efectuar la fecundación en el interior de las hembras. Aletas redondeadas (salvo la anal en los machos adultos), con la dorsal ligeramente retrasada con respecto a la anal. Escamas bien definidas. Boca súpera dotada de pequeños y agudos dientecillos. Habita cualquier zona acuática, principalmente los tramos medios y bajos de los ríos y otras masas de agua estancadas (charcas, embalses...), gracias a su gran resistencia (soporta salinidades superiores al 20%, temperaturas extremas, cierto grado de contaminación...).

Es una especie originaria de Norteamérica que se introdujo legalmente en la península ibérica en el año 1921 con la intención de combatir el paludismo (las larvas de mosquitos constituyen uno de sus principales alimentos) pero que, gracias a las condiciones idóneas que encontró (temperaturas cálidas), a su precocidad sexual (adultos a partir de 5 o 6 semanas) y a su fecundidad (hasta tres generaciones por temporada), se extendió rápidamente llegando a poner en peligro, como serio competidor que incluso ha desplazado a alguna de ellas, a varias especies autóctonas. En Ávila se puede encontrar en el río Tiétar, en algunos embalses de otras subcuencas y en varias charcas y lagunas.

Peces de Ávila

Lucioperca

Sander lucioperca (Linnaeus, 1758)

Es un pez de tamaño grande, siendo las hembras mayores que los machos. En su área de origen puede sobrepasar el metro de longitud y alcanzar pesos superiores a los 15 Kg., mientras que en la península ibérica rara vez supera los 70 cm. y los 5 Kg. de peso. Se trata de un pez alargado, con la aleta caudal escotada y dos aletas dorsales, la primera -la más adelantada- con radios espinosos y la segunda con radios blandos, teniendo ambas una base de longitud semejante y estando moteadas con manchas oscuras (más patentes en la primera). Presenta un color pardo verdoso que se va aclarando hacía el vientre, que es blanco, apareciendo en los costados unas manchas oscuras irregulares que forman unas difusas bandas transversales. Cabeza “afilada”, ojos relativamente grandes y boca provista de numerosos dientes. Habita en lagos, embalses y cursos medios-bajos de los ríos, buscando zonas abiertas con aguas calmas, con fondos despejados de vegetación y que estén poco contaminadas (necesita, como mínimo, un nivel medio-alto de oxigenación).

Es una especie originaria del este de Europa que se introdujo en España, de manera legal y de modo experimental, a finales de los años setenta del pasado siglo, concretamente en el Embalse de Boadella (Girona). Poco después, y siendo introducido ya de manera ilegal, este pez inició su expansión por el resto de la geografía española (otras zonas de Cataluña; cuenca del Ebro -destacando el Embalse de Mequinenza, donde alcanza las mayores tallas-; cuenca del Tajo; del Duero; del Júcar...). Es una especie muy voraz que se alimenta de especies autóctonas y produce un serio desequilibrio en las zonas donde se introduce. Parece ser que ya ha llegado hasta la provincia de Ávila, habiéndose detectado en el río Alberche (en el Embalse del Burguillo, desde el otoño de 2014, se vienen capturando ejemplares que superan los 25 cm.).

Peces de Ávila

Pez gato negro

Ameiurus melas (Rafinesque, 1820)

Pez grande en su lugar de origen (frecuentemente más de 60 cm. y 3 Kg.) que en la península ibérica se puede considerar como de tamaño medio (rara vez supera los 30 cm.). Cuerpo alargado y robusto, algo aplanado en su mitad delantera. Posee una segunda aleta dorsal adiposa y la primera dorsal y las pectorales cuentan con radios espinosos punzantes. Carece de escamas, teniendo la piel dura y el cuerpo recubierto de mucosidad. Cabeza grande, ancha y aplanada, con la boca también grande y rodeada de cuatro pares de largos barbillones. Ojos muy pequeños. Habita zonas de corriente lenta, con fondos limosos y abundante vegetación, soportando altas temperaturas y resistiendo bien ante la escasez de oxígeno.

Es una especie originaria de Norteamérica que se introdujo ilegalmente en la península ibérica a principios del siglo XX, habiendo alcanzado en los últimos años una notable expansión que, tratándose de un voraz depredador, pone en peligro a muchas de las especies autóctonas. En la provincia de Ávila aparece, aunque por suerte todavía lejos de poder considerarse como plaga, en algunos embalses (hay citas de capturas en Las Cogotas, Rosarito y Serones).

Peces de Ávila

Lucio

Esox lucius (Linnaeus, 1758)

Pez con el cuerpo alargado y comprimido lateralmente que puede alcanzar gran tamaño, en la península ibérica hasta 120 cm., aunque es más normal encontrar ejemplares adultos de menor talla (20 a 70 cm.). Aletas bien desarrolladas y redondeadas (salvo la caudal que es algo ahorquillada), con la dorsal muy retrasada, justo en la vertical de la anal. Escamas relativamente pequeñas. Cabeza grande con la boca también grande, ancha y aplanada, provista de dientes fuerte y muy afilados. Habita generalmente los tramos medios de los ríos, buscando remansos con abundante vegetación desde la que acechar a sus presas, aunque puede encontrarse tanto en embalses como en tramos altos de los ríos y otras zonas de mayor corriente.

Es una especie que faltaba en la península ibérica (aunque se han encontrado fósiles del Pleistoceno en la cuenca del Tajo) y se introdujo legalmente en 1949 con la intención de fomentar la pesca deportiva. Se trata de un depredador voraz que pone en peligro a muchas de las especies autóctonas. En Ávila su presencia es muy escasa, aunque el número de lugares en los que ha sido capturado ha aumentado en los últimos años.

Peces de Ávila

Carpa

Cyprinus carpio (Linnaeus, 1758)

Pez de gran tamaño, en la península ibérica son frecuentes los ejemplares que alcanzan tallas superiores a 70 cm., con el cuerpo comprimido lateralmente. Aletas fuertes y bien desarrolladas, sobre todo la caudal (algo ahorquillada) y la dorsal (larga y con una amplia base de más de 15 radios). Existen varias “razas” en función de sus escamas: la carpa de espejos, con escamas muy grandes y distribuidas irregularmente; la carpa lineal, con unas pocas escamas en la base de la aleta dorsal y en la línea lateral; la carpa cuero, casi sin escamas y con la piel muy dura; quedando la denominación de carpa común para la variedad que presenta unas escamas relativamente pequeñas (más pequeñas y estilizadas que en el carpín) y distribuidas regularmente por todo el cuerpo.

Cuenta con una cabeza grande, la boca terminal y protráctil con dos pares de barbillones. Habita aguas de corriente lenta y estancadas, por lo que se puede encontrar en los tramos bajos de los ríos, en embalses, en lagos, etc., soportando altas temperaturas, bajas concentraciones de oxígeno y aguas algo contaminadas.

Es una especie originaria del centro y el este de Europa y de gran parte de Asia que parece ser que se introdujo en la península ibérica durante la época de dominación romana, estando presente actualmente en casi todas las cuencas. Se trata de una especie que altera considerablemente los hábitats acuáticos por lo que puede llegar a perjudicar seriamente a las especies autóctonas. En Ávila podemos encontrarla en casi todos los embalses y en algunos tramos de los ríos más caudalosos.

Peces de Ávila

Pez rojo, Carpín

Carassius auratus (Linnaeus, 1758)

Pez de tamaño medio, con el cuerpo robusto, corto y comprimido lateralmente, que en la península ibérica suele alcanzar, de adulto, una talla de 15 a 25 cm., encontrándose, en aquellos lugares donde se dan unas óptimas condiciones, ejemplares algo mayores (hasta 45 cm.). Aletas fuertes y bien desarrolladas, destacando la larga dorsal con una amplia base de 14 a 20 radios. Escamas grandes y toscas. Cabeza grande con la boca terminal, relativamente pequeña y sin barbillones. Habita los tramos medios y bajos de los ríos (en las zonas de menor corriente) y otras masas de aguas lentas o estancadas (charcas, lagos, embalses, estanques...) soportando bajas concentraciones de oxígeno y aguas algo contaminadas.

Es una especie originaria de Asia que se introdujo en el siglo XVII en la península ibérica como pez ornamental, habiéndose extendido por casi todas las cuencas. No parece suponer un grave peligro para las especies autóctonas (aunque si no se limita su continua expansión, podría llegar a ser un serio competidor para alguna de ellas). En Ávila podemos encontrarla en casi todos los embalses y en algunos tramos de los ríos tributarios de los mismos.

Peces de Ávila

Alburno

Alburnus alburnus (Linnaeus, 1758)

Pez de mediano tamaño que en la península ibérica puede llegar a alcanzar los 25 cm., con el cuerpo alargado y algo comprimido lateralmente. Entre sus aletas, que están poco pigmentadas, destacan la anal (con la base muy ancha, llegando a tener hasta 20 radios), la dorsal (muy retrasada con respecto a las ventrales) y la caudal (muy desarrollada y ahorquillada); las aletas inferiores son más grandes en los machos. Cabeza relativamente pequeña, con los ojos grandes y la boca súpera. Habita generalmente los tramos medios y bajos de los ríos y aguas embalsadas, alimentándose cerca de la superficie.

Es una especie originaria del norte y el centro de Europa que se introdujo en la península ibérica como pez pasto para los depredadores de mayor tamaño y como cebo vivo para la pesca. Es un serio competidor para algunas especies autóctonas (en ocasiones también ejerce de depredador sobre los ejemplares jóvenes de las mismas). En la provincia de Ávila, y esperemos que así sea por mucho tiempo, no está muy extendido, habiéndose observado y capturado de manera esporádica en algunos ríos y embalses.

Peces de Ávila

Perca americana, Black bass

Micropterus salmoides (Lacépède, 1802)

Pez grande que en su área de origen puede sobrepasar el metro de longitud, pero que en la península ibérica es difícil que supere los 60 cm., con el cuerpo compacto y algo comprimido lateralmente, y un pedúnculo caudal largo y estrecho. Posee dos aletas dorsales, la más adelantada de radios espinosos y la más retrasada, que además está más desarrollada, de radios blandos; la anal es ancha y relativamente larga. Cabeza, ojos y boca grandes, con la mandíbula inferior más grande que la superior y numerosos dientes. Habita embalses y aguas calmas de los ríos, preferiblemente con mucha vegetación. Soporta bien las aguas con temperaturas altas (incluso superiores a los 35º).

Es una especie originaria del sur y el este de los Estados Unidos y del norte de México que se introdujo en España en 1955, de manera legal, con la intención de promocionar la pesca deportiva. Es un voraz depredador que, en algunos ríos, supone un serio peligro para algunas especies autóctonas. En la provincia de Ávila se puede encontrar en algunos embalses (principalmente en los de la subcuenca del río Alberche).

Peces de Ávila

Pez sol, Perca sol

Lepomis gibbosus (Linnaeus, 1758)

Es un pez de mediano tamaño, en su área de origen puede sobrepasar los 30 cm., aunque en la península ibérica rara vez alcanza los 15. Cuerpo alto y comprimido lateralmente, con el pedúnculo caudal estrecho y una coloración muy llamativa, cuyas tonalidades varían en función del hábitat que ocupa, y siendo característica la mancha oscura redondeada en el borde superior de los opérculos que, en los machos, y durante la época de freza, está ribeteada de color rojo vivo. La aleta dorsal, relativamente grande, está dividida en dos partes: la primera, la más adelantada, de radios espinosos y la segunda con radios blandos; la anal es de base ancha y las pectorales se encuentran en posición adelantada. Cabeza y ojos grandes. Habita los cursos medios y bajos de los ríos, buscando las zonas de menor corriente, y aguas estancadas (charcas, embalses...) en zonas en las que abunde la vegetación acuática. Soporta bien las altas temperaturas y la escasez de oxígeno.

Es una especie originaria de Norteamérica que se introdujo en España a principios del siglo XX, alcanzando una notable expansión durante las últimas décadas del mismo y convirtiéndose en un indeseable competidor para muchas de las especies autóctonas. En Ávila aún se encuentra en fase de expansión, ya que en un principio únicamente se localizaba en algunas zonas del río Tiétar y, desafortunadamente, cada vez es capturada con más frecuencia en algunos embalses (Las Cogotas, El Burguillo, Fuentes Claras...).

Peces de Ávila

Trucha común

Salmo trutta (Linnaeus, 1758)

Es un pez grande que puede llegar a alcanzar los 85 cm., aunque es difícil encontrar ejemplares por encima de los 50; su talla depende del lugar donde habita, siendo más pequeños los ejemplares que viven en arroyos y aquellos que se encuentran en masas de agua en las que escasea el alimento. Cuerpo alargado y comprimido lateralmente, con una coloración variable en función del hábitat que ocupa. Posee una aleta adiposa detrás de la dorsal, estando el inicio de esta última más adelantado que el de las ventrales. Las escamas son muy pequeñas. Cabeza grande, ojos igualmente grandes y la boca ancha con dientes. Habita los cursos altos de los ríos, buscando las zonas de corriente y siendo muy exigente con la calidad del agua.

Es una especie autóctona que se encuentra en regresión (presión de pesca, contaminación acuática, introducción de depredadores alóctonos, repoblación con ejemplares centroeuropeos que, estando menos acostumbrados a las altas temperaturas peninsulares, contribuyen a un empobrecimiento genético...). En Ávila todavía podemos encontrarla con facilidad en las cabeceras de los ríos Alberche y Tormes, en alguno de los afluentes del Tiétar que nacen en la Sierra de Gredos y, cada vez con menor frecuencia, en algunos arroyos y ríos de la subcuenca del Adaja.

Peces de Ávila

Tenca

Tinca tinca (Linnaeus, 1758)

Pez grande que puede llegar a alcanzar los 85 cm., aunque lo normal es que su talla ronde los 40, con el cuerpo robusto y comprimido lateralmente. Aletas fuertes y de contorno redondeado, con la dorsal estrecha y casi a la misma altura que las ventrales (que están más desarrolladas en los machos). Escamas muy pequeñas y piel con abundante mucosidad. Cabeza grande con los ojos relativamente pequeños y la boca con labios gruesos y un par de barbillones. Habita los cursos bajos de los ríos con aguas lentas, embalses y charcas con fondos blandos y abundante vegetación, siendo muy resistente a las altas temperaturas y la escasez de oxígeno.

Se considera una especie autóctona de la península ibérica, puesto que se han encontrado restos en yacimientos arqueológicos de la edad del bronce. En la provincia de Ávila no es muy frecuente, encontrándose en charcas privadas, principalmente del valle del Tiétar, y en algunos embalses (Rosarito, Serones, etc.).

Peces de Ávila

Bordallo, cacho, cachuelo

Squalius carolitertii (Doadrio, 1987) y

Squalius pyrenaicus (Günther,1868)

Los “cachos” son peces de mediano tamaño que, en óptimas condiciones, pueden llegar a superar los 35 cm., aunque lo normal es que los adultos midan entre 12 y 25. Aletas medianamente desarrolladas y fuertes, con la caudal algo ahorquillada y la dorsal relativamente larga y un poco retrasada con respecto a las ventrales. Escamas grandes con una mancha negra en su base y con el borde punteado, también de negro, lo que confiere a estos peces un aspecto reticulado. Cabeza grande con la boca algo subterminal y el labio superior más largo que el inferior. Se los puede encontrar en todos los tramos de los ríos en los que habita.

Estos peces, que tradicionalmente han sido conocidos como “cachos”, están presentes en casi todos los ríos de la provincia de Ávila. Realmente se trata de dos especies distintas: el bordallo (Squalius carolitertii), endemismo ibérico de la cuenca de los ríos Duero, Mondego, Limia, Miño y Lériz, lo podríamos encontrar en los ríos de Ávila que pertenecen a la cuenca del Duero; y el cacho o cachuelo (Squalius pyrenaicus), otro endemismo ibérico, en esta ocasión de las cuencas de la mitad sur de la península, que encontraríamos en los ríos abulenses de la cuenca del Tajo. (En la cabecera del Alberche también hay bordallos, circunstancia que puede deberse a una captura fluvial que desvió estas aguas, que originalmente vertían en la cuenca del Duero, hacia la cuenca del Tajo).

Peces de Ávila

Calandino

Squalius alburnoides (Steindachner, 1866)

Pez de pequeño tamaño, generalmente de hasta 13 cm. (los machos son más pequeños y rara vez superan los 8). Cuerpo alargado y pedúnculo caudal largo y estrecho. Aleta caudal ahorquillada y dorsal con una mancha negra en su base y retrasada con respecto a las ventrales. Escamas bien definidas. Cabeza pequeña y, normalmente, con la boca súpera, aunque hay individuos con la boca terminal. Poco exigente con las zonas en las que habita, se puede encontrar tanto en los tramos altos y arroyos de montaña, como en embalses y otras zonas de agua pobres en oxígeno.

Es un endemismo ibérico que, en la provincia de Ávila, todavía podemos encontrar en casi todos los ríos. Es muy sensible a la alteración de los cauces y a la introducción de competidores y depredadores alóctonos, por lo que en algunos de nuestros ríos está sufriendo una importante regresión.

No está considerada como una especie pescable en Ávila, por lo tanto se deben devolver inmediatamente al agua, y con el menor daño posible, los ejemplares que se capturen.

Peces de Ávila

Boga de río

Pseudochondrostoma polylepis (Steindachner, 1864)

Pez de mediano tamaño, generalmente de unos 30 cm., que puede llegar a alcanzar los 50 en condiciones óptimas (siendo las hembras más grandes que los machos). Aletas bien desarrolladas, destacando la caudal que, además, es ahorquillada. Tiene escamas pequeñas. Hocico puntiagudo, boca ínfera y de abertura recta, contando con una lámina córnea en el labio inferior. Habita principalmente en embalses y aguas tranquilas de los tramos medios de los ríos, lugares que abandona durante la época de freza, remontando río arriba para desovar.

Se trata de un endemismo ibérico natural de las cuencas de los ríos Alcoa, Mondego, Sado, Tajo y Vouga, también presente en las del Júcar y Segura (por la traslocación debida a trasvases), que podemos encontrar en la provincia de Ávila en las subcuencas de los ríos Alberche y Tiétar.

Peces de Ávila

Boga del Duero

Pseudochondrostoma duriense (Coelho, 1985)

Pez de mediano tamaño que rara vez supera los 30 cm., con el cuerpo alargado y esbelto, las hembras son más grandes que los machos. Tiene unas manchas oscuras por el dorso. Las aletas anal y dorsal son relativamente largas, y la caudal ahorquillada. Posee escamas pequeñas. Boca ínfera y con abertura recta, teniendo una lámina córnea en el labio inferior. Habita principalmente los tramos medios de los ríos, buscando zonas de corriente, aunque también en embalses y aguas más tranquilas. Forma grupos numerosos para remontar los ríos en la migración pre-freza.

Este endemismo ibérico, presente en algunos ríos del noroeste (asturianos, gallegos y portugueses) y principalmente en la cuenca del río Duero (al que debe su nombre), se encuentra en clara regresión, pudiendo todavía disfrutar de su presencia en la provincia de Ávila en la subcuenca del Tormes y, en menor medida, en la del Adaja.

Peces de Ávila

Barbo común

Luciobarbus bocagei (Steindachner, 1864)

Pez fuerte y grande de hasta 60 cm. (ocasionalmente puede llegar a alcanzar tallas superiores, algunos ejemplares han llegado a 1 m.), con el cuerpo alargado y algo comprimido lateralmente, los machos son menores que las hembras. Las aletas, con la base relativamente pequeña, son fuertes, la caudal muy ahorquillada y las hembras poseen la anal muy desarrollada para limpiar el lugar de desove. Boca protráctil y subterminal con dos pares de barbillones. Escamas con el borde oscuro que le proporcionan un aspecto reticulado. Los ejemplares jóvenes tienen manchas oscuras repartidas por el cuerpo. Habita en embalses y en tramos medios y bajos, que abandona remontando los ríos en la época de freza.

Es un endemismo ibérico de las cuencas atlánticas de los ríos Tajo, Mondego, Duero y Limia. En la provincia de Ávila está presente en casi todos los ríos.

Peces de Ávila

Pardilla

Iberochondrostoma lemmingii (Steindachner, 1866)

Pez de pequeño tamaño que, de manera excepcional, llega a alcanzar una talla de 20 cm., aunque generalmente los individuos adultos miden entre 10 y 15 (los machos tienen el cuerpo algo alargado y son más pequeños que las hembras). Tiene el pedúnculo caudal ancho y las aletas de un tamaño medio (siendo las inferiores algo mayores en los machos que, durante la época de celo, presentan un color ocre anaranjado en la inserción de las mismas), el inicio de la dorsal se encuentra más o menos a la misma altura que el de las ventrales, en la aleta caudal y en la dorsal presenta una serie de motitas oscuras que también suele tener repartidas de manera desigual por el cuerpo. Boca subterminal con el labio inferior curvo. Habita en embalses y en los tramos medios y bajos de los ríos, con aguas lentas y abundante vegetación sumergida que le ofrece protección y parte de su alimento.

Este endemismo ibérico presente en las cuencas de los ríos Tajo, Guadiana y Guadalquivir, podemos encontrarlo en la provincia de Ávila en el río Tiétar y en alguno de sus afluentes. Su pesca está prohibida, ya que se trata de una especie protegida, por lo que se deberán devolver de manera inmediata al agua, y con el menor daño posible, todos los ejemplares que se capturen.

Peces de Ávila

Gobio

Gobio lozanoi (Doadrio y Madeira, 2004)

Pez de pequeño tamaño, de hasta 13 cm. (ocasionalmente llega a los 15). Aletas con puntos oscuros que, en la dorsal y caudal, llegan a formar líneas transversales. Las escamas tienen el borde oscuro, proporcionando a este pez un aspecto reticulado. Los ojos elevados, grandes y saltones. Boca con dos barbillones. Prefiere los tramos medios de los ríos, buscando fondos de grava o arena, aunque se puede encontrar tanto en tramos altos, como en tramos bajos y embalses.

Estamos ante un endemismo hispano-francés, parece ser que originario de las cuencas pirenaicas y del Ebro, que posteriormente se introdujo en gran parte del resto de las cuencas ibéricas, no suponiendo amenaza alguna para la fauna autóctona. En la provincia de Ávila está presente en la subcuenca del Adaja, llegando a ser abundante en el propio río Adaja y en el Voltoya, en la del Tormes, ambas pertenecientes a la cuenca del Duero y, en la del Tajo, habita tanto en la subcuenca del Alberche, principalmente aguas arriba del embalse del Burguillo, como en la del Tiétar.

Peces de Ávila

Bermejuela

Achondrostoma arcasii (Steindachner, 1866)

Es un pez de pequeño tamaño que ocasionalmente llega a alcanzar los 15 cm. de longitud total, aunque lo más normal es que que no supere los 12 (las hembras son de mayor talla que los machos). Aletas de tamaño medio (siendo las inferiores algo mayores en los machos) y el inicio de la dorsal se encuentra más o menos a la misma altura que el de las ventrales; es característico el color rojo anaranjado en las inserciones de las aletas pectorales, ventrales y anal. Hocico redondeado en las hembras y algo alargado en los machos, con la boca casi subterminal. Gran capacidad de adaptación, habitando desde los tramos altos y limpios de los ríos, hasta los tramos bajos y embalses, con agua de peor calidad, llegando a resistir durante los estiajes en pequeñas charcas pobres en oxígeno.

Se trata de un endemismo ibérico, y en la provincia de Ávila está presente, por el momento, en casi todos sus ríos. Es una especie sensible a la introducción de competidores y depredadores alóctonos, y a la constante alteración de su hábitat (canalizaciones, construcción de presas, extracción de áridos...), por lo que su población está disminuyendo en toda nuestra geografía provincial.

Actualmente es una especie protegida y su pesca está prohibida, aunque es fácil que, en aquellos lugares donde todavía se encuentra, se capture algún ejemplar que deberá ser devuelto inmediatamente al agua con el menor daño posible.

Peces de Ávila

Colmilleja

Cobitis paludica (De Buen, 1929)

Pez de pequeño tamaño, generalmente de hasta 10 cm., aunque puede llegar a superar los 13 cm. (siendo los machos menores que las hembras), cuerpo muy alargado y pedúnculo caudal corto y ancho. Tiene escamas ovaladas diminutas. La base de la aleta dorsal se inicia por delante de la vertical que pasa por el de las ventrales, siendo todas las aletas cortas y redondeadas (en los machos, las aletas pares son algo mayores, con un engrosamiento en forma de hacha en el segundo radio de las pectorales, que se conoce como escama de Canestrini). Debajo de los ojos posee una fosa que alberga una pequeña espina ósea que le sirve como defensa ante los depredadores. Boca subterminal rodeada por tres pares de barbillones. Habita los tramos medio-bajos de los ríos con fondos de arena, cieno o lodo, y tiene la capacidad de respirar el aire atmosférico, por lo que llega a sobrevivir en aguas estancadas con escasez de oxígeno.

Es un endemismo ibérico que en la provincia de Ávila está presente en los ríos Adaja y Tormes (y algunos de sus afluentes), en la cuenca del Duero, y en los ríos Alberche y Tiétar (e igualmente en algunos de sus afluentes) en la cuenca del Tajo.

No presenta interés para la pesca recreativa, siendo una especie protegida y, por lo tanto, estando prohibida su captura.

Peces de Ávila

Lamprehuela

Cobitis calderoni (Bacescu, 1962)

Pequeño pez que raramente supera los 8 cm. de longitud total, con el cuerpo muy alargado y un pedúnculo caudal largo y estrecho. Tiene escamas ovaladas diminutas. Aletas pequeñas, con las ventrales muy separadas de las pectorales y el inicio de la base de la dorsal por detrás de la vertical que pasa por el de las ventrales. Ojos reducidos, debajo de los que posee una fosa que contiene una pequeña espina que puede desplegar defensivamente. Boca subterminal rodeada por seis barbillones. Habita principalmente los tramos medio-altos de los ríos, aprovechando los fondos pedregosos de los mismos.

Esta especie, que es un endemismo ibérico de las cuencas de los ríos Duero, Ebro y Tajo, actualmente solo está presente en la provincia de Ávila en el río Voltoya, aguas arriba del embalse de Serones, y en alguno de sus afluentes.

No presenta ningún tipo de interés para la pesca recreativa, siendo además una especie protegida y estando prohibida su captura.

Peces de Ávila

Anguila

Anguilla anguilla (Linnaeus, 1758)

Pez serpentiforme con aletas pectorales bien desarrolladas, carece de aletas ventrales y las aletas anal, caudal y dorsal están unidas formando una sola aleta continua. La cabeza y los ojos son pequeños. Tiene escamas diminutas, casi imperceptibles, incrustadas en la piel que está recubierta de abundante mucosidad. Puede alcanzar una talla de 150 cm. y un peso superior a los 4 kg., siendo las hembras más gruesas y largas que los machos. En ambientes lo suficientemente húmedos puede hacer cortos desplazamientos fuera del agua.

Los escasos ejemplares que actualmente podemos encontrar en la provincia de Ávila provienen de repoblaciones efectuadas en los ríos Adaja, Alberche, Tiétar y Tormes.

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