Sábado 12 de octubre de 2013, Fuentes Claras

El otoño avanza, las temperaturas (sobre todo las nocturnas) van cayendo y sabemos que nos quedan pocas jornadas de pesca durante este año, así que hay que aprovechar todas las ocasiones que se presenten.

El equipo de Los Tres Pescadores se encontraba disponible al completo durante esta mañana, por lo que sus miembros se desplazaron al lugar habitual de pesca de la pasada primavera con la intención de pasar un par de horas recordando viejos tiempos.

De camino, junto a los habituales chistes y chascarrillos, alguna propuesta "anónima" destinada a amedrentar a alguno de sus "anónimos" rivales... "el que consiga la pieza mayor no pesca durante la próxima jornada".

Bastantes pescadores por la zona, pero por suerte nuestro sitio libre. Algo de viento, unos catorce grados, el agua ya bastante fría... transcurren los minutos y los peces muestran poca actividad, Varo decide ir a comprobar si está libre el lugar más visitado durante el verano. A su vuelta, mientras confirma que los puestos están desocupados, observa como UisBerto se estrena con un carpín de 24 cm.

A pesar de esta captura, y ya que los pescadores vecinos todavía no habían pescado, los tres deciden cambiar de lugar, observando, nada más llegar a los nuevos puestos, que allí los peces están un poco más activos.

UisBerto consigue un nuevo carpín, grande, bastante grande, podría llegar a rivalizar con la pieza mayor del año, pero de un fuerte coletazo vuelve al agua impidiendo conocer su talla.

Varo sentencia: "el cambio de lugar ha sido un acierto", Berto asiente y añade: "además aquí hay mucho más entretenimiento colateral (avispas, cormoranes, patos...)".

Uisberto continúa con las capturas, tres carpines más de 20, 22 y 28 cm.

Berto, tras alguna pérdida de material, ya se ha centrado de lleno en el entretenimiento colateral capturando mariposas con la sacadera.

Varo ya no está tan contento por  lo del cambio de lugar y piensa en voz alta sobre la creación de nuevas categorías: "no estaría nada mal la de pez imaginario...".

Con el estómago marcando la hora de comer, recogida de trastos, tratando de dejar todo tal y como lo encontramos, y vuelta a casa con el deseo de que todavía podamos realizar alguna jornada más durante lo que queda de año.