... cinco cañas, tres pescadores... dos de ellos decidieron montar toda la artillería...
Hubo algunas picadas, aunque todas infructuosas, y en algún momento aflojó un poco el viento, circunstancia que nos hizo pensar que no terminaríamos a cero...
... pero ya se sabe...
Día en el que manda eolo
si vas de pesca
y no tienes suerte
lo fácil es hacer bolo.
Así que nos volvimos a casa después de dos horitas de aire fresco y disfrute (lo que nos dejan, no es tan difícil recoger una lata vacía...) de la naturaleza.
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